Denuncian venta abierta de pornografía infantil en Bangkok
Bangkok - Tailandia.- arc/amv - (PL) La venta de pornografía infantil a plena luz del día indigna hoy a habitantes y turistas de Bangkok, donde la policía parece indiferente ante un fenómeno inimaginable hasta hace poco.
El diario Bangkok Post denunció este domingo que los comerciantes de películas pirateadas venden a poco menos de tres dólares material XXX, cuyas explícitas carátulas escandalizan a los transeúntes.
Los videos son protagonizados por niños de Myanmar, Tailandia, Filipinas y hasta europeos, algunos menores de siete años de edad, según la información en las portadas de los DVDS.
Dicha mercancía se oferta en la principal calle turística de esta capital, entre éxitos de Hollywood, videos de bestialismo y drogas que supuestamente incrementan el rendimiento sexual.
Si el descaro de los vendedores irrita, más indignación aún causa la indiferencia policial, que ni actúa contra el material pederasta ni contra la flagrante violación de las leyes de copyright.
Según las leyes tailandesas, la policía pude confiscar material obsceno basándose en las portadas, pues su distribución o exhibición implica cárcel de acuerdo a la sección 287 del Código Penal.
Sin embargo, las fuentes policiales citadas por el Bangkok Post alegan que el comercio de videos pedófilos está amparado por mafias poderosas, que se sienten intocables por las autoridades locales.
El diario Bangkok Post denunció este domingo que los comerciantes de películas pirateadas venden a poco menos de tres dólares material XXX, cuyas explícitas carátulas escandalizan a los transeúntes.
Los videos son protagonizados por niños de Myanmar, Tailandia, Filipinas y hasta europeos, algunos menores de siete años de edad, según la información en las portadas de los DVDS.
Dicha mercancía se oferta en la principal calle turística de esta capital, entre éxitos de Hollywood, videos de bestialismo y drogas que supuestamente incrementan el rendimiento sexual.
Si el descaro de los vendedores irrita, más indignación aún causa la indiferencia policial, que ni actúa contra el material pederasta ni contra la flagrante violación de las leyes de copyright.
Según las leyes tailandesas, la policía pude confiscar material obsceno basándose en las portadas, pues su distribución o exhibición implica cárcel de acuerdo a la sección 287 del Código Penal.
Sin embargo, las fuentes policiales citadas por el Bangkok Post alegan que el comercio de videos pedófilos está amparado por mafias poderosas, que se sienten intocables por las autoridades locales.
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