La Policía realiza una operación al mes en Asturias contra la pornografía infantil

España.- Félix VALLINA - (lne.es ) La Brigada de Investigación Tecnológica de la Jefatura Superior Policía de Oviedo realiza al menos una operación mensual contra la pornografía infantil en internet y está preparando una intervención que se llevará a cabo de forma inminente. Al menos eso se deduce de las palabras de un responsable de dicho departamento, que ayer tomó parte en la charla organizada por el Ayuntamiento de Avilés para alertar a las familias sobre los peligros de la red: «dentro de poco haremos otra», señaló literalmente el policía, que quiso mantener su anonimato por motivos de seguridad. En el acto, que tuvo lugar en la casa de la Cultura, también participó un representante de la comisaría avilesina y la concejala de Bienestar Social, Yolanda Alonso. Durante la charla, bajo el epígrafe «Los riesgos de internet», los expertos trataron de alertar a los padres sobre los peligros a los que se enfrentan sus hijos cuando se sientan delante del ordenador.

Los responsables policiales aseguran que los delitos que se registran en Asturias están relacionados con la tenencia y distribución de material pornográfico infantil y que no suele ser habitual encontrar archivos en los que los protagonistas sean niños españoles. «Generalmente, el material que se detecta tiene como víctimas a niños de países del Este de Europa, Asia y de Sudamérica». Los expertos aseguran que el perfil del detenido suele corresponderse con el de un hombre de entre 30 y 50 años que está casado y tiene hijos. «Uno puede pensar que el pedófilo es el típico solitario, encerrado en casa y que no se relaciona con los demás, y lo que nos estamos encontrando es el casado con dos o tres hijos y con ordenadores hasta arriba de este material», señaló uno de los ponentes.

A lo largo de la conferencia también se pusieron algunos ejemplos de casos en los que los menores incurren en un delito a través de la red, como por ejemplo el reciente caso del «hacker» de 15 años del concejo de Boal, que supuestamente logró hacerse con los datos bancarios de 250.000 personas y después trató de extorsionar a los responsables de la empresa pidiéndoles dinero por deshacerse de la información. «Lo que hacía era chantajear a esa empresa, hasta el punto de pedir un céntimo por cada uno de los datos, lo que sumaba 2.500 euros. El chaval para unas cosas era muy listo, pero para otras era un pardillo porque esa información valdría bastante más que eso», aseguró uno de los policías. Con este ejemplo quisieron poner sobre la mesa las consecuencias que tienen este tipo de delitos, «que para los chicos desinformados puede parecer un juego y en realidad pueden acarrear sanciones graves».

Uno de los focos de la delincuencia en internet se centra en redes sociales como twitter o facebook, donde, en la mayoría de las ocasiones, los menores son víctimas de delitos como el «grooming». «A veces hay adultos que utilizan fotos falsas de adolescentes y se ponen en contacto con niñas hasta que consiguen una fotografía comprometida. Una vez que la tienen la amenazan con enviársela a todos sus contactos de la red social y la obligan a enviarles más material. Después les piden videos y hasta tratan de quedar con ellas en hoteles. Ya se han dado varios casos», alertó un ponente. Los policías también advirtieron sobre las consecuencias de los perfiles falsos -ya se ha detenido a varios adolescentes por acoso y trato vejatorio hacia un compañero de colegio amparándose en una identidad falsa- o del robo de cuentas de los correos electrónicos -personas que se hacen con las contraseñas de forma ilícita para obtener información- y señalaron que la solución para acabar con este tipo de prácticas es la información desde los centros escolares y la supervisión de los padres. «No es bueno que los menores tengan sus ordenadores en la habitación, hay que controlarlos».